SOPORTE Y MANTENIMIENTO
SOPORTE REACTIVO ANTE INCIDENCIAS
Cuando se produce un fallo o problema, el equipo de soporte, trabaja para diagnosticar y resolver el problema lo más rápido posible. El soporte reactivo es esencial para abordar problemas inesperados, minimizar el tiempo de inactividad y restaurar la funcionalidad del sistema.SOPORTE PROACTIVO
Monitorización continua de los sistemas de TI para identificar posibles problemas antes de que afecten a la operatividad del negocio. Los equipos de soporte utilizan herramientas de monitorización y análisis para supervisar el rendimiento, la capacidad y la seguridad de los sistemas, identificando patrones y tendencias que puedan indicar problemas potenciales. Al anticiparse a los problemas, el soporte proactivo puede ayudar a prevenir interrupciones y optimizar el rendimiento de los sistemas.
MANTENIMIENTO PREVENTIVO
El mantenimiento preventivo se centra en realizar acciones planificadas y sistemáticas para evitar problemas futuros y mantener los sistemas de TI en condiciones óptimas. Esto puede incluir tareas como actualizaciones de software y parches de seguridad, copias de seguridad regulares de datos, limpieza y optimización de sistemas, y evaluaciones de seguridad. El mantenimiento preventivo ayuda a reducir el riesgo de fallos y problemas de seguridad, garantizando la continuidad del negocio.SOPORTE EVOLUTIVO
Se enfoca en la mejora continua y el desarrollo de los sistemas de TI para satisfacer las necesidades cambiantes del negocio y aprovechar nuevas oportunidades tecnológicas. Esto puede incluir la actualización de sistemas y aplicaciones, la implementación de nuevas funcionalidades y características, la optimización de procesos y la integración de nuevas tecnologías emergentes. El soporte evolutivo ayuda a garantizar que los sistemas de TI sigan siendo relevantes, eficientes y alineados con los objetivos de negocio a largo plazo.
La disponibilidad 24×7 es un componente crítico en todos los niveles de soporte y mantenimiento de TI, especialmente en entornos empresariales donde la operatividad continua es esencial. Esto implica tener personal técnico disponible en todo momento para responder a emergencias, resolver problemas urgentes y garantizar que los sistemas estén disponibles y funcionando correctamente en todo momento, incluso fuera del horario laboral estándar.